Breve historia de la Colonia Roma

Limites: al norte, la Av. Chapultepec; al sur calles de Antonio M. Anza y Coahuila; al oriente, Eje Vial Cuauhtemoc; al poniente, las avenidas Tamaulipas y Veracruz.
El 28 de marzo, Eduardo M. Orrin solicitó al Ayuntamiento la aprobación del proyecto que presentó para el fraccionamiento de los terrenos situados en el ángulo formado por las avenidas Chapultepec y de la Piedad (hoy A v. Cuauhtemoc), en un predio denominado Potreros de Romita, al lado del pueblo de Romita. Orrin informó que el fraccionamiento, que se denominaría Roma, no comprendería a Romita, de la que derivó su nombre. Estos terrenos eran propiedad de los señores Echegaray y Calero Sierra e iban por el oriente de la Calzada de la Piedad (hoy Av. Cuauhtemoc) a la Calzada de la Hacienda de la Condesa (Calzada de Tacubaya, hoy de José de Vasconcelos) por el sur y, al norte, hasta la Calzada Chapultepec (hoy Av. Cha­pultepec).

El 30 de noviembre de 1902 se aprobó el convenio celebrado para el establecimiento de la Colonia Roma. Las calles de la colonia eran, de norte a sureste: Av. Chapultepec, Puebla, Durango/ Colima y Tabasco; de noroeste a suroeste: Guaymas, Morelia, Córdoba, Orizaba, Jalapa y Tonalá. Dos ingenieros norteamericanos, los hermanos Lamm, fueron quienes crearon la empresa que se dedicó a la venta de terrenos y casas. Algunas de ellas fueron proyectadas y cons­truidas por ellos.
Una publicación oficial de 1906 menciona a la Roma como una de las colonias ya urbanizadas. Como centro tenía la Plaza Río de Janeiro, y su urbanización se inspiró en el de las ciudades europeas: anchas avenidas, arboledas y plazas jardinadas. Por algu­nos aspectos de sus características arquitectónicas y sociales que se conservan, esta primera área de la Colonia Roma se considera como prolongación de la Juárez, la que estaba muy poblada cuando se inició su colonización. Sin embargo, a diferencia de esta que nació y se desarrolló durante el porfirismo, la Roma inició su crecimiento en las postrimerías de este, creció lentamente durante el periodo revolucionario y con cierta rapi­dez en los años siguientes.

Esta colonia, al igual que las de la Condesa y la Juárez y posteriormente la Hipódromo Condesa, desde sus principios fue lugar en donde connotadas familias capitalinas tuvieron su residencia. Hoy, dentro de la jurisdicción de la Colonia Roma, se encuentra el pintoresco barrio de Real de Romita. En la colonia, se conserva solo uno de cada 10 inmuebles construidos antes de 1950.
El Barrio de Romita brinda singulares antecedentes históricos. Al respecto se recuerda que la Secretaria de Gobernación pidió al Ayuntamiento que le informara en que condiciones se había concedido el permiso para establecer es­ta colonia, y el informe se rindió el 3 de abril de 1903. EI 2 de junio de 1903 el Cabildo acordó que se remitiera al gobierno del Distrito Federal el proyecto elaborado por la Dirección de Obras Públicas para proceder a los alineamientos a que debía sujetarse, condición primordial para su urbanización.
Hoy las calles de Romita son prolongación de las de la Co­lonia Roma, de la que forma parte. En agosto de 1988, las autoridades decidie­ron realizar su rescate y remozamiento. Romita es el antiguo pueblo de Aztacalco (En la casa de las garzas). Estaba ubica­do en los limites de la Gran TenochtitIán, "hacia el Bosque de ChapuItepec", dice Orozco y Berra, sobre un islote cir­cundado por canales. A su templo, Santa María de la Natividad de Aztacalco, "primero le cambiaron el nombre y después lo degradaron de parroquia a capilla", dice Alfonso Aresti Liguori; su capellán desde 1962.

Respecto al origen de la nomenclatu­ra de esta colonia, el historiador José E. Iturriaga refiere que "a fines del siglo pasado vino a México un cirquero ingles llamado Henry Orrin en compañía del payaso Ricardo Bell, cuyos monólogos eran aplaudidos a rabiar por el público. El Circo Orrin, que entonces crearon, operaba en el lugar mismo donde se inventó el mambo, en la calle de Aquiles Serdán (Eje Central Lázaro Cárdenas), en la plazoleta ubicada entre las calles de Pensador Mexicano y Mina. Orrin utilizaba hábilmente la figura del dictador guatemalteco, Estrada Cabrera para lanzar toda clase de saetas envenenadas a Porfirio Díaz. Así, Orrin y Bell ganaron un dineral y compraron la Hacienda de Romita con el fin de fraccionarla. Después hicieron una gira por la republica y les fue admirablemente bien, de modo que al regresar bautizaron las calles del nuevo fraccionamiento con el nombre de ciudades donde más aplausos habían recibido: Puebla, Colima, Guaymas, etc.".

En la Colonia Roma se encuentra la Casa Universitaria del Libro, que ocupa el inmueble, ubicado en la esquina de las calles de Puebla y Orizaba, que fuese sede del Centro Asturiano hasta que este, en 1986, se trasladó a su nueva sede diseñada y construida en el No. 4 de las calles de Arquímedes, Colonia Polanco, por un grupo de arquitectos (Enrique Martorell, Juan José Díaz Infante y Joaquín Álvarez Ordoñez) dirigido por el Arq. Juan Sardo Madaleno. La casa de la Colonia Roma se conserva en excelentes condiciones. Fue construida a principios de siglo por Joaquín Baranda y la familia Mc Gregor, quienes la habitaron a partir de 1920. Fue ocupada en un tiempo por la Embajada de Brasil. En la década de los años treinta fue adquirida por el Centro Asturiano de México, el que la entregó a la Universidad Nacional Autónoma de México mediante contrato de comodato, celebrado en 1986, para uso gratuito durante 10 años y cinco más de prórroga.